Día 17: 17 músculos y más

La lucha es una constante en la vida y por eso está presente en Origen Inverso. No hay que tomarlo como algo negativo, ni mucho menos, pero hay que aceptarlo y por eso se ve reflejado en estos 29 Días con 29 Performances.

El Gabinete de Historia Natural se convirtió en un pequeño ring con un fondo oscuro. En el medio estaba un cuerpo con pigmentos nácar de espaldas al público y saltando a la comba al ritmo de un cajón flamenco.

Aunque suenan los golpes del cajón, el público está callado y en ese silencio ficticio oímos la comba como un látigo agitándose en el aire. La intensidad aumenta, se aceleran los saltos, se acelera el cajón. El polvo del pigmento nacarado que cubre el cuerpo inunda la sala.

origen Inverso Abajo Izquierdo

El chico deja de saltar y sale al ring un hombre de entre el público. Como si de un ritual se tratase, este último cubre su cuerpo con un pigmento de color bronce. Ya están hechos los equipos y comienza la lucha al ritmo del cajón. Cada vez que se produce un golpe resuena un segundo cajón para intensificar el efecto. El polvo sigue en el ambiente formando una especie de nube que escarcha a su paso.

El hombre se va del ring y aparece una chica que también cubre su cuerpo con el pigmento cobre pero lleva en sus manos unos guantes de boxeo. Segundo combate. Se oye el cajón y los jadeos de los luchadores, la pelea se intensifica y tras un golpe directo de derecha el chico cae al suelo. Se hace el silencio.

Como si de una obra de teatro se tratara podríamos usar la expresión “Fin del primer acto” porque esta performance ha tenido dos partes distinguidas aun siendo una.

29 días 29 performances Abajo Izquierdo

A continuación el chico se pone un pantalón corto de boxeo y se sienta detrás de una mesa, se dirige al público:

“Hace tres años estaba trabajando en el Domino’s Pizza y preferí enfrentarme a una persona en el ring que a toda la sociedad. El boxeo es lo que tengo para conseguir dinero y para salir adelante. Se necesita fuerza física y fuerza de voluntad.

Empecé entrenando a chavales que no tenían nada que perder y ahora ellos tienen una salida.

El boxeo es un deporte con una gran disciplina que me ha traído dinero y muchas amistades. Me ha cambiado la vida y me ha hecho mejor persona.”

Después de estas reflexiones, el boxeador ha invitado al público a echar un pulso con él porque no se trata de ganar o perder, sino de sentir la fuerza física y sobre todo la fuerza de la superación. Desde el público han ido salido algunas personas voluntarias.

Las vivencias que expresan los protagonistas de las performances se recogerán en un libro para formar Origen Inverso.

Acting: Óscar Muñoz Lara, Manuel Espín y Vanessa Bejarano.
Asistencia técnica: Pedro, José, Pablo y María.
Música: Guillermo Camarada